Nicolás Fuenzalida, emprendedor e inversionista: “Broota es una tremenda plataforma porque además hace una curatoría previa filtrando startups antes de salir a ronda”

A sus 37 años, Nicolás Fuenzalida es conocido en el ecosistema emprendedor por cofundar Políglota, startup que disponibiliza una plataforma de aprendizaje de idiomas de forma grupal y remota. Es una startup icónica en nuestro país, pues ha sabido adaptarse durante la pandemia e incluso ha sido una de las 15 chilenas en ser aceptadas por Y-Combinator. 

Pero en esta entrevista no le quisimos preguntar sobre su paso por Y-C ni por cómo le ha ido a Políglota. En esta oportunidad, quisimos hablar con él y que nos converse desde otra vereda: desde su experiencia como inversionista en startups. Precisamente sobre su visión como inversionista ángel a través de Broota. 

Fuenzalida es Licenciado en Filosofía (UAH), Magister en Psicología Organizacional (UAI), Diploma de Innovación y Liderazgo (MIT). Más de alguno creería que cofundar una startup es labor exclusiva de ingenieros o que las inversiones son solo para personas que tienen formación en áreas económicas y financieras. Pero no.

Su background lo llevó a tener una visión bien particular sobre las inversiones. “Invertir es justamente lo contrario a gastar y gastar implica perder algo; en cambio invertir implica dar valor a algo en el futuro”, explica de entrada.

“Por suerte hoy existen suficientes alternativas para que todos puedan tener la capacidad de  invertir. Muchas veces no se hace por falta de información o por desconocimiento. Hay muchas fuentes, cada uno cree y tiene sus propios horizontes en cada inversión que realiza. Por eso hay que analizar y creer para aportar al momento de invertir”, puntualiza.

— ¿En qué inviertes, Nicolás?

“Yo invierto en startups, fondos mutuos y en instrumentos tradicionales. No he invertido en criptomonedas, pero trato de diversificar mucho mis inversiones”. 

— ¿Cuándo y cómo se gestó tu interés por invertir en startups? 

“Como estoy metido en el mundo del emprendimiento, es común darse cuenta que hay mucho valor en el ecosistema. Hay emprendedores que están haciendo cosas para cambiar industrias y dar valor. Eso da retorno. Es plata bien invertida. Es interesante dar valor de vuelta porque hay muchas startups que están haciendo las cosas bien. En ese sentido, Broota es una tremenda plataforma porque además hace una curatoría previa filtrando startups antes de salir a ronda. Eso ayuda mucho no sólo al inversionista, sino que también a las startups para que entreguen valor tangible”.

— ¿Cuál fue la primera startup en la que invertiste?

“En la primera startup en la que invertí fue en Políglota: invertí plata, tiempo, gente, redes, entre otras cosas”, responde mientras se ríe. “¿Pero en startups externas? No recuerdo el orden, pero creo que primero fue MisAbogados y luego Pago Fácil, ambas en el año 2017. Conocía a los fundadores y sentía que iban a seguir adelante para empujar ese emprendimiento contra vientos y mareas. Con Pago Fácil me pasó que a Cristián (Tala) lo vi bien enfocado, con una mirada analítica incisiva y fue el indicio de que la startup iba a crecer de forma importante. Y así fue”.

(Nota de la R: A la fecha, Fuenzalida ha invertido en MisAbogados, Pago Fácil, Pura, Socialab, Babytuto, Ecopass, Desafío Latam y Ecoterra, además del Diversifica Startups DS1)

— ¿En qué te fijas al momento de invertir en una startup? 

“Yo personalmente creo que lo más importante es el equipo. Es fundamental. Las ideas y las industrias sobran, pero los equipos no. Quienes están detrás importa mucho porque son quienes empujan el negocio. Luego, la tracción y el crecimiento que van generando, pero de forma tangible. Y por último, la oportunidad del mercado, eso tiene que ver con el timing”.

— ¿Cómo supiste de Broota?

“Ya ni me acuerdo, pero debió ser cuando estaba empezando. Me acuerdo de Manga Corta, donde mi socio de Políglota invirtió. Luego conocí a José Antonio y al resto del equipo. Me pareció que en ese entonces estaban haciendo cosas interesantes cuando había muy poco. Y yo siempre he sido fan de Broota”.

— ¿Qué viste en Broota que decidiste invertir a través de su plataforma?

“Me gustó que la propuesta de Broota siempre fue muy clara. Aquí están las startups, tú puedes invertir, te hacemos el papeleo y puedes tener retorno. Simple y sin promesas falsas. Y al mismo tiempo fueron muy claros en el valor que estaban entregando tanto a emprendedores como a  inversionistas. Yo creo que las startups que le hacen bien al ecosistema son las startups que se ponen al servicio de empujar otras cosas. Y creo que Broota le está haciendo muy bien a nuestro ecosistema. Creo que en este tiempo ha hecho un tremendo aporte, sin dudas”.

— ¿Qué le dirías a alguien que no conoce Broota y cómo lo convencerías de invertir en startups?

“Le diría que piense en cuáles son las compañías más exitosas que conoce y en cuáles le hubiese gustado invertir hace diez años. Y que eso mismo puede hacer hoy. Le diría que puede probar con algunas pensando en el futuro, con montos no muy altos. Y además, le dejaría claro que diversifique y que además podrá contribuir al ecosistema. Hay que atreverse”.

— ¿Por qué crees que es importante diversificar?

“Porque toda inversión es un riesgo. Mientras más arriesgo, más retorno espero. Si quisiera poco riesgo, voy a un money market o a otro instrumento. Pero si quiero multiplicar por más, debo arriesgar más. Por eso es importante invertir en varias startups y en distintos tipos de instrumentos para ir mitigando el riesgo. No hay que fanatizarse ni poner todo en un mismo lugar, por eso siempre hay que diversificar”.

— ¿Cuál crees que es el desafío que se viene para todos quienes componen el ecosistema startup?

“Hoy estamos en un escenario bien complejo: la guerra de Rusia-Ucrania junto al Covid ha generado una resaca económica mundial. Eso se acumuló y hoy se ven algunos efectos, generando olas en todos los mercados. Las inversiones se frenaron y los fondos están invirtiendo menos, están buscando mayor rentabilidad. Mayor certidumbre”. 

— ¿A qué escenario crees que nos lleva esto?

“Eso nos puede afectar de distintas maneras. Hay menos posibilidad de levantar inversiones, pero las startups con operaciones sanas que realmente venden son las que van a prevalecer. Es  una tremenda oportunidad en relación a startups que quizás puedan tener valorizaciones más infladas”. 

— ¿Y esto en qué podría repercutir? 

“En el caso de la inversión en startups, esto permitirá que los fundadores sean más prolijos y menos despilfarradores con sus levantamientos. Eso disminuirá el riesgo y abre una ventana a que le exijamos más. Quizás mejore con el tiempo, cuando veamos a las startups que queden vivas”.