Cristián Tala y el ecosistema emprendedor nacional: “Tienen que existir más founders que se la jueguen por nuevas startups. No veo a muchos en esa línea y es preocupante”
- ¿Qué podemos decir de Cristián Tala? Antes de fundar PagoFácil —que es por lo que muchos lo conocen— ya invertía en startups. Actualmente conduce dos podcast (El Ecosistema de las Startups y Podcast de Forja) y acaba de lanzar “Inversión en Startups”, un libro que asegura le “hubiese servido mucho leer antes de emprender porque no cuenta lo obvio”.
- En esta ocasión conversamos de todo. ¿Cómo ve el ecosistema startupero? ¿Qué nos falta? ¿Los Venture Capital van en buena línea? “Al único que veo que invierte de manera activa y permanente es Ignacio Canals, pero del resto no veo a muchos en la misma línea y es preocupante. El fundador no está viendo el beneficio y eso es culpa del ecosistema que tampoco lo ve. Hay un ecosistema que ha creído e invertido en ellos pero ellos no lo están haciendo. Están cortando el círculo virtuoso”, deslizó.
Muchos del ecosistema emprendedor conocen a Cristián Tala porque fundó PagoFácil, pero muchos desconocen cuál fue el recorrido que hizo antes de lograr el exit de su startup a BCI y Evo Payment en 2020. Hoy, a sus 37 años, podría estar jubilado pero sigue activo, invirtiendo y apoyando a nuevas startups. “Yo antes de emprender, ya invertía en startups”, recuerda con orgullo.
Tala también fue padrino en la tercera, cuarta y quinta generación de Start-Up Chile: “Ese rol era ayudarlos a adaptarse al país y estar en contacto con emprendedores, más que ser mentor. Desde ahí comenzó mi cuento. En ese tiempo invertí por medio de Indiegogo y Kickstarter y en 2014 por primera vez lo hice por equity, a través de Broota. Eso me motivó a seguir invirtiendo”.
Hoy —en su rol como inversionista ángel— invita a co-fundadores de otras startups “exitosas” a hacer lo mismo y que también contribuyan al ecosistema chileno. “Tienen que existir más founders que se la jueguen por nuevas startups. No veo a muchos en esa línea y es preocupante. El founder no está viendo el beneficio y eso también es culpa del ecosistema que no está mostrando bien los beneficios”, apunta.
— ¿Cuándo comenzaste a invertir en startups?
“Fue en 2014 y mi primera inversión fue en Khipu. Yo llegué a Khipu porque quería soluciones a Transbank para la empresa familiar (Nota de la r: www.empresasctm.cl) en la que trabajaba. Cuando me junté con ellos, justo estaban levantando capital a través de Broota. Así conocí la plataforma y me encantó”.
— Además de trabajar en la empresa de tu familia, ¿Estabas en algo más? ¿Emprendiendo?
“En ese entonces estaba trabajando en la empresa de mis viejos, tenía mi empresa personal de asesorías en la que ayudaba a la gente a tener ecommerce y medios de pago en Chile y hacía clases. Fui ayudante y en ese período fui profesor alrededor de seis años en cursos de Informática y en Industrial, además era padrino en Start-Up Chile”.
— Mientras trabajabas en la empresa de tu familia, fuiste a estudiar un MBA en Países Bajos, ¿no es algo contracíclico para un futuro emprendedor?
“Sí, es cierto, pero es porque yo en ese entonces seguía trabajando en esa empresa y sentía que me faltaban más herramientas. De hecho, en mi examen de título para el MBA creé PagoFácil. Tenía que hacer un business plan y yo prefería hacerlo en la práctica más que en teoría… y así la creé”.
— Y si no hubieras estudiado el MBA ni creado PagoFácil, ¿crees que hubieras emprendido igual?
“Yo creo que sí, porque incluso en Países Bajos me gané un fondo de 50 mil euros para hacer otro proyecto que acercaba el mundo smart contracts con blockchain a todo tipo de personas, entonces estaba en la duda. Por eso cuando creé PagoFácil decidí recibir inversión a través de Broota y eso me ayudó a empujar mi propia startup. Mi intención siempre fue estar tres años en la empresa familiar… y al final estuve cinco. Hubo muchas cosas que quería lograr y que no pude hacerlo. Cuando me di cuenta que no podía hacer mucho más de lo que ya había logrado, me fui”.
EL ABC DE LA INVERSIÓN EN STARTUPS
— Cambiando de tema, ¿en qué te fijas al momento de invertir en una startup?
“En ese tiempo me fijaba en la solución principalmente, pero hoy no tanto. Primero me fijaba en la solución, si sirve o no, y así invertí en Khipu, VendeTú y otras startups. Hoy pongo énfasis en si los emprendedores realmente quieren solucionar un problema o si la solución solo es un nice to have. Me gustan los emprendimientos que se obsesionan con solucionar un problema. Que tengan una garra de por medio, de querer solucionar algún problema porque les duele en serio”.
— Pero eso es el equipo, ¿o no?
“Sí, es verdad, pero voy al trasfondo. Me importa mucho el porqué quiere solucionar el problema. Si el fundador quiere y está enamorado del problema, hará todo lo posible por hacerlo.
Hoy, además del problema, uno espera que haya ciertos roles que estén en el equipo. Un visionario, por ejemplo, que es muy importante tenerlo en el equipo, incluso más allá de sus competencias técnicas. Alguien que sepa de productos, alguien que sepa de temas comerciales”.
— ¿Que haya emprendido antes? ¿Que haya fracasado antes lo ponderas?
“Está bien, pero no es algo que me seduzca mucho. La experiencia sirve para entender un problema, no para escalarlo”.
— ¿Cómo ves hoy al ecosistema emprendedor chileno? ¿Lo ves más maduro?
“Al principio hubo mucho fracaso. Hoy está mucho más maduro, de eso no hay dudas. Y aunque me estés entrevistando por Broota, tengo que decir que Broota también vino a cambiar algo en este ecosistema: acercar la inversión en startups a la gente es un antes y un después; además ha servido para ver casos de éxito que impactaron e impactarán en la gente común y corriente… eso es espectacular”.
— Pero tampoco hay muchos casos de éxito en Chile…
“Sí, es cierto, pero si queremos apoyar este ecosistema, los founders tenemos que apoyar a nuevas startups… eso indudablemente hará que a todos nos vaya bien”.
— Pero a ver, ¿crees que los founders de otras startups «exitosas» deberían apoyar más a otras startups emergentes?
“Te lo digo de otra forma. Si no fuera por Broota, yo no tendría nada para invertir en startups. Y sí, creo en las startups y creo que aquí todos debemos remar para que al ecosistema le vaya bien. Lo que viene a futuro es un ecosistema que debemos generar entre todos. Debemos ser más los founders que invirtamos dinero y tiempo en otras nuevas startups. Yo mentoreo mucho e invierto de manera directa. Yo siempre les digo que si les va bien, hagan lo mismo. No hay que cortar el círculo”.
— ¿Es un «deber ser» que los fundadores inviertan en nuevas startups?
“Cuando puedan, en general cuando ya les vaya bien.; pero sí, es un deber ser”.
— ¿Crees que no lo hacen?
“Son pocos los que están retribuyendo. No lo suficiente”.
— ¿Y por qué crees que no lo hacen? ¿Crees que es ilógico?
“Y más que ilógico es egoísta y hay mucho desconocimiento también”.
— Hay un montón de fundadores que no están invirtiendo, ¿crees que no saben?
“Al único que veo que lo hace de manera activa y permanente es Ignacio Canals, pero del resto no veo a muchos en la misma línea y es preocupante. El fundador no está viendo el beneficio y eso es culpa del ecosistema que tampoco lo ve. Hay un ecosistema que ha creído e invertido en ellos pero ellos no lo están haciendo. Están cortando el círculo virtuoso”.
— ¿Cuál sería el beneficio directo?
“Por ejemplo, a mí me fue bien porque yo quería que a la gente le fuese bien. Eso impactó positivamente porque muchos me recomendaban y me trajo un montón de nuevos clientes. Si por el contrario la gente no está alineada, es porque no ve un beneficio y a eso súmale el el riesgo que implica invertir en startups”.
— En Argentina, por ejemplo, pasó que los mismos fundadores de startups invirtieron en nuevas startups, como Wenceslao Casares…
Sí, pero eso no está pasando en Chile. Ojalá ocurra más. Tienen que existir más founders que se la jueguen por nuevos emprendimientos.
— Y hay gente que incluso tiene menos recursos y aún así está invirtiendo más que muchos founders
“Es que los founders no ven el beneficio. El latino tiene ese concepto de que si me está yendo mal es porque el gobierno es el problema. Y así nadie se hace cargo de las cosas. En este caso es lo mismo. Nadie se hace cargo de sus roles”.
— ¿Pero no debieran invertir también porque también pudieran dar alguna rentabilidad? Suena más bien altruista el invertir por invertir, ¿o no? ¿Qué motivación podría tener una persona que no pertenece al ecosistema?
“Hay distintos motivos, pero el principal es que si guardas tu plata en tu cuenta bancaria, sabes que esa plata se está depreciando. En el último año fue 13% por la inflación y el año anterior un monto similar. Además que las inversiones más tradicionales no lograron buenas rentabilidades tampoco”.
— Pero hay distintos instrumentos de inversión…
“Efectivamente hay distintos instrumentos de inversión, pero invertir en startups tiene una convicción adicional que es invertir en las grandes empresas del mañana. Al final no le mueves la aguja a una empresa grande invirtiendo en la bolsa, o junto al banco, pero el impacto que generas invirtiendo en una startup impacta en la sociedad y en muchas vidas”.
— ¿Crees que el buen talento de hoy prefiere fundar o trabajar en startups?
“Absolutamente. Si te fijas, hoy en día hay talento muy bueno con estudios en el extranjero que prefiere trabajar en una startup aun ganando menos que en un banco o en una empresa tradicional. ¿Por qué? Por beneficios, por carrera, por flexibilidad, porque son compañías más desafiantes y porque eres parte dueño de la compañía que están co creando”.
— Cambio de tema. Hay algo que muchos quieren saber: ¿Cuán grande es tu portafolio de startups? ¿En cuántas startups has invertido?
“¿La verdad? No lo sé, pero son muchas jajajaja. Participo en 5 fondos, además de las inversiones en Broota, así que perdí la cuenta del número de startups en las que he invertido debido a que no todas son de manera directa”.
— ¿Y vas a seguir invirtiendo o quieres esperar un rato?
“Yo tengo un límite máximo de lo que quiero invertir en startups, que sería el 25% de mi patrimonio y eso ocurrirá este 2023. Pensé que me demoraría más, pero ojo que una cosa es no seguir invirtiendo y la otra es apoyar a nuevas startups… y yo seguiré apoyando sí o sí a nuevas startups, mientras espero el retorno de mis inversiones para poder volver a invertir”.
— El éxito del ecosistema muchas veces es cruel y se mide por exits o por salidas a la bolsa, ¿en Chile estamos generando más startups buenas que los exits que puedan ocurrir en el futuro?
“Si no hacemos nada hoy, no”.
— ¿Por qué?
“¿Cuántos casos de éxito tendremos? Hay un montón de startups choras que no están logrando el exit. Hay algo que tenemos que hacer con el ecosistema para que eso ocurra”.
— ¿Qué tenemos que hacer?
“Yo creo que depende de cada actor. Lo que yo estoy haciendo es juntarme con fondos internacionales, juntarme con otros inversionistas. Hacer follow on y conectarse es importante. La idea no es solo generar pymes felices, sino que también generemos más exits. Tenemos que pavimentar esto. Bajo la lógica que tenemos hoy, será difícil que existan muchos más exits”.
Por el lado de las startups, me parece que también deben ser más receptivas al momento de escuchar”.
SOBRE SUS PODCAST, LIBRO Y DESAFÍOS
— ¿Al emprendedor chileno le falta creerse el cuento y tener más ganas de comerse el mundo?
“No deberíamos llegar a tener factores mentales adversos para crecer y querer comerse el mundo. Por eso yo quiero aportar mi granito aportando con libros, podcast, textos, etc. La idea es permear a los jóvenes, a las universidades, con cursos de innovación y emprendimiento. Ojalá escuchen las universidades también”.
— ¿Por eso decidiste escribir tu libro “Inversión en Startups”? ¿Cómo surgió la idea de escribirlo?
“No es por lo que crees jejejej. A mí siempre me gustó escribir. Siempre he tenido mi blog y lo dejé botado. Me gusta transmitir conocimientos. Luego pasó el tiempo y hay más competencia, mejoré el SEO y antes era más fácil llegar a más gente. Hoy las personas buscan más contenido en YouTube o ven cosas en redes sociales. Creo que tengo conocimiento útil para el ecosistema pero no estaba llegando a la gente que quería llegar. Me metí más en redes sociales y tengo harto que contar. Por esos motivos también escribí este libro que es muy amigable y de fácil lectura”.
— ¿Hay mucho desconocimiento de lo que vive un emprendedor? ¿Crees que se cuenta lo bonito nomás?
“La gente realmente no entiende todo lo que uno hace para emprender. ¿Cómo en tres años pasé de fundar una startup a tener un exit con la misma? En ese período tuve estrés, estuve hospitalizado, no dormía, entre otras cosas. Cuando ocurrió el exit, mi familia, amigos y conocidos me dijeron “qué suerte tuviste”. Entonces la gente muchas veces no sabe lo que vivimos los fundadores de startups. Y eso lo quise transmitir con ese libro.
— Y creaste dos podcast, ¿surgió por lo mismo?
“Los podcast nacieron por lo mismo. El El Ecosistema de las Startups, tal como dice su nombre, busca responder las preguntas de la gente y que ojalá todos puedan escuchar las respuestas. Ese es el fondo, que sea prácticamente una comunidad. En cuanto a El Podcast de Forja, que hago junto a Diego Rodríguez y José Antonio Berríos, busca proponer temas de conversación en base a algunos temas startuperos”.
— ¿Crees que podamos ser el Israel de Latinoamérica?
“Uhmm no me gustaría compararme con otro país, pero creo que sí podríamos ser un polo de innovación importante. Aunque muchos se están yendo, pero creo que se puede”.
— ¿Qué falta?
“Un montón, partiendo por los Venture Capital”.
— ¿Los Venture Capital van en buena línea?
“Los Venture Capital tienen que tener claro que muchas veces invertirán en algo que va a cambiar. Es evidente que si invierten en una startup en fase temprana el producto puede cambiar. Y noto mucho nerviosismo cuando eso ocurre en la práctica”.
— Y a los fundadores de startups, ¿qué les falta?
“Hay mucho fundador de startup con mentalidad de empleado y eso no es bueno. Hay que entender y aceptar que uno como founder va a ganar menos que estando empleado en un banco. Y muchos tratan de ponerse el mismo sueldo y al mismo tiempo los veo quejándose de que necesitan plata para contratar gente. Eso no puede ocurrir”.